sábado, 10 de enero de 2015

El fútbol no se toca VIII


El fútbol no se toca VIII
Eva Tacazo

—¿Siguiente?
—¿Qué pasa, mamón?
—… ¿Perdón?
—…
—Ehhhhh, siéntese y dígame en qué le puedo ayudar.
—Paso de sentarme a ver tu cara de vicioso y putero. ¿Se lo cuentas a tu mujer?
—Perdone, pero… creo que se está equivocando, ¡eh…!
—¡Calla! Mentiroso, infame. ¿Les cuentas a tus clientes que les robas cada día lo que puedes? ¿Les cuentas que les vendes productos que necesitan, como las hipotecas, con intereses abusivos, y que además eres consciente de ello, de la bufonada de la que tú participas, so payaso?
—Mire, está faltándome al respeto aquí, en mi trabajo y voy a tener que…
—¿Ahora te das cuenta, impotente? Cuéntales a todos estos que eres un impotente, anda. ¡Adivina quién me lo ha dicho!
—Alfredo, llama a la policía que me estoy calentando y…
—Y ¿qué? Si todos sabemos que eres un cobarde y que te escondes detrás de la mesa, y detrás de las vallas, y detrás de la pantalla.
—Pero, ¿qué dices? Tú estás mal de la cabeza. Y ya te estás pasando…
—¡Oh, no me digas!  Y ¿me vas a pegar? ¡Señores, cállenme la boca o el cavernícola acomplejado este me va a pegar! Me va a pegar unos azotes. Sí. Eso es lo que te gusta, ¿verdad? Los azotitos.
—A ver, tú, ¿qué pasa aquí? Los clientes de este banco están avergonzados de verte. Lárgate que te estás retratando.
—No hablo contigo.
—Alfredo, ¿has llamao a la policía?
—Claro. Ya vienen. ¿De qué conoces al flipao este?
—¡Yo qué sé!
—¡Ah! ¿No lo sabes? ¿No te acuerdas de mí?
—…
—Soy el árbitro que pitó el sábado por la tarde al Talavera contra El Ponto.

jueves, 8 de enero de 2015

Inmejorable


Inmejorable
El niño cielo y Díptero impertinente

—Ring…, ring…, ring…
—Sí, ¿quién es?
—Buenos días, ¿hablo con don Hefesto Greco?
—Sí, ¿quién es?
—Le llamo de OVO, su servicio de telefonía que le va a ofrecer una oferta que no podrá rechazar.
—A ver, porque siempre…
—Verá, don Hefesto, en EMOSKI un pack de cerveza con 6 botellines ANSTEL le cuesta 2,45€. Nosotros le vendemos un pack de 5 por tan solo 1,80€. ¿Qué le parece?
—Bueno…, no sé… Pero ¿esto no es, o sea, tú has dicho que eres de OVO Telefonía?
—Sí. Entiendo. Señor Greco, nos estamos diversificando… Verá, es una oferta única. Y con la compra de dos packs le ofrecemos…
—Pero ¿hay oferta de mi teléfono?
—No, en este caso la oferta es de productos de…
—Entonces no me interesa, ¡eh!
—Veamos, don Hefesto, ¿usted necesita una rebaja en su cuota mensual?
—Sí, sí…
—Nos consta que ahora mismo está usted pagando 27€ más IVA. Si usted compra el pack de 5 cervezas por solo 1,80 cada mes, podemos hacerle un descuento de 2€ al mes durante un año, por lo que cada pack le saldría por -0,20€. Señor Greco, estaría usted pagando por Telefonía, 500 Mb de datos y un pack de 5 cervezas menos de lo que está usted pagando ahora.
—Eso ya está mejor. Y ¿todos los meses?
—Sí, señor. Pero le decía antes que si aún quiere disfrutar más de su descanso podemos ofrecerle 2 packs de 5 botellines para cuando vea los partidos de su equipo favorito, más un cepillo ergonómico multisensitivo para perros de regalo por tan solo 1,20€ más. ¿Qué le parece? ¿Le doy el alta en el servicio?
—Pero…, es que yo no tengo perro.
—¡Pero podría tenerlo, nunca se sabe! A lo mejor un familiar, un regalo… No sé si está al tanto pero las últimas estadísticas señalan que salimos a una mascota por cada dos personas, ¿qué le parece?, ¡quién lo diría! Yo misma le regalé el pack a mi marido y el cepillo a mi madre. ¡Se siente tan sola que una compañía es un tesoro!
—Bueno…, tengo prima…
—Y ahora, don Hefesto, por ser usted un cliente Gold le ofrecemos una oferta exclusiva a la que no todo el mundo puede acceder. Es el seguro de vida Gold Vida. Permítame que le explique básicamente las cláusulas de beneficio: usted percibirá…
—No, no. Espere. Yo ya tengo seguro de vida con mi hipoteca y…
—¡Estupendo!, pero déjeme decirle que usted si está pagándola con la hipoteca la cobertura es solo a la hipoteca.
—Ya, pero ¿para qué quiero más?
—¿Está trabajando, señor Greco?
—…
—Si usted está de baja más de 1 semana, el Seguro Gold Descanse le abona 7€ por cada día que usted no pueda ir a trabajar. Y si sobrepasa el mes cada día se incrementa en 1€.
—O sea, al octavo día me pagan 7€, y al noveno también y así hasta…
—Efectivamente. Es irrechazable. Pero eso no es todo. Nos consta que está usted casado. Su mujer percibiría 5000€ si su fallecimiento sucede yendo al trabajo, «in itinere».
—¡Joer! Lo que pasa es que yo voy en bus, no cojo coche…
—La cobertura cubre también un accidente de autobús en carretera o urbano. ¿Conoce la estadística?
—No…
—Hay más accidentes en autobús, señor Greco, que en avión. ¡Quién lo diría!
—Vaya.
—¿Le abro la póliza?
—Pero cuánto cuesta.
—Señor Greco, cobertura de baja laboral, accidente «in itinere» y un brazo extensible para el mando televisivo o para coger cualquier objeto, por supuesto de regalo, por la bajada de precio que ha roto el mercado: 11,25€. Le envío la póliza a su correo. Solo ha de abrirlo, contestar «Acepto», y reenviar.
—Es que no sé yo si…
—Y los tres primeros meses son gratis. No puede negarse, don Hefesto.
—Es que…
—¡Mmmm! Veo que es usted un hombre crítico, de los pies a la cabeza, y además inteligente. Si me concede un solo minuto se lo demostraré. Tenga en cuenta que ya sale ganando con el pack mensual…
—Bueno, pero un minuto ¡eh!
—Verá, OVO está trabajando en un nuevo servicio. Aún no ha salido al mercado pero, con-fi-den-cial-mente, lo hará para el próximo mes. Se trata de la experiencia Familia feliz. Suena bien, ¿verdad?
—…
—Le explico. El servicio le ofrece disponer de una familia durante tres días al año que usted elija y donde usted elija.
—Mmmm, no entiendo.
—Sabía que le iba a encantar. Supongamos que desearía pasar tres días de vacaciones inolvidables en un entorno paradisíaco, playas mágicas y noches de pasión. Se lo ofrecemos, señor Greco, con la compañía de una familia que usted elija.
—… Pero… si yo ya tengo familia. Si yo estoy casado.
—Por eso mismo… Imagine tener la posibilidad de modificar algún aspecto de su familia... Sé que lo está pensando, pero no lo diga, forma parte de su intimidad. No puedo entrar en más detalles, pero solo imagine que le ofrecemos esa posibilidad durante tres días mágicos.
—¡¡Que yo elija una familia!! ¿Cómo?
—Familia feliz dispone de un amplísimo abanico donde decidir. Hefesto, tú decides.
—…
—Intuyo que estás dudando. OVO ha pensado también en tu familia y le ofrece a tu mujer que durante esos tres días escoja entre fin de semana de retiro y descanso en el Monasterio de Silos o el Seminario de fin de semana Origen, desarrollo, evolución y muerte de agujeros negros en el continuo espacio-tiempo.
—Ah. Suena…, suena…
—No me diga más. Sus hijos disponen o bien del Parque temático de Danza ecuestre o bien del Parque temático Condensación y Criogenización en la Nueva Alta Cocina.
—…
—Lo sé. Hemos pensado en todo. Ya le dije que era una experiencia única.
—Ya veo…
—Puedo apuntarte para que seas el primero al que llamen el próximo mes… Hefesto, ¿quieres saber lo que es la felicidad?
Y desde la cocina, como una tragedia que amarga un mazapán, se desploma una voz.
—¡Festooooooooooo, cuelga atontao, que al plato le van a salir canas y a mí en el coño!